Demanda externa se enlentece, pero sin complicar exportaciones

El panorama económico mundial para el futuro próximo promete una recuperación en los países desarrollados que ayudará a que crezca el comercio mundial, pero no evitará que los principales socios comerciales de Uruguay lo hagan a menores tasas.Tampoco evitará que la demanda global de materias primas pierda dinamismo y con ella el empuje de los precios de las commodities que en los últimos años fue pilar fundamental en el crecimiento económico de los países emergentes.De todas formas, las noticias no son tan malas para el país, puesto que nuestros rubros de exportación son los que menos sufrirán y se espera una baja en el precio de los insumos como el caso del petróleo.De acuerdo al estudio semestral sobre las perspectivas económicas mundiales del Fondo Monetario Internacional (FMI), la recuperación de las economías desarrolladas se está afianzando, lideradas por Estados Unidos y el núcleo duro de la zona euro.Ello abre perspectivas favorables al comercio mundial. Desde la óptica de la economía uruguaya es una posibilidad cierta, pero que enfrenta el desafío de superar los problemas de competitividad que padecen varios sectores productivos.Por otra parte, si bien son socios comerciales importantes, las economías desarrolladas no son en la actualidad los principales destinos de las exportaciones uruguayas; la región y China son quienes más compran nuestros productos. En tal sentido, en el corto plazo para Uruguay lo más relevante es proyectar el desempeño de la demanda de esos mercados.El FMI proyecta un enlentecimiento en el crecimiento de los principales socios comerciales del país, lo que no es una buena noticia. En el caso de Brasil, prevé que la economía siga desacelerándose, proyectando un crecimiento de 1,8% para el presente año, resaltando el flojo nivel de la inversión privada, debido a la pérdida de competitividad y bajo nivel de confianza de los empresarios. Para Argentina proyecta una situación prácticamente de estancamiento.China está en una etapa de transición, en el que la economía se enlentece. La política económica apunta a un cambio en el patrón de crecimiento, hacia un modelo más sustentable a largo plazo, en el que el consumo interno adquiere un rol más importante.Luego de tres décadas creciendo a una tasa promedio del 10% anual, se proyecta una moderación en el ritmo de expansión, en el entorno al 7,5% anual.El enlentecimiento de la economía china genera inquietudes. Esa menor tasa de incremento en el nivel de actividad se traslada a un...