'El mejor negocio es un club de fútbol'

José Luis Palma: Bisturí sin anestesia del presidente de una entidad modelo que, sin embargo, hoy está en la "B".Uno le pregunta y responde. Sólo eso. No da la impresión de creer que la suya es la verdad revelada. "Escucho a mis colegas decir que el fútbol uruguayo es inviable, y yo digo que es el mejor negocio. Lo más fácil de manejar es un club de fútbol; porque en Uruguay los clubes son asociaciones civiles con una serie de privilegios, que el legislador quiso que estén exoneradas de pagos al Estado a los que está obligada cualquier empresa privada. Liverpool tiene más de US$ 10: de patrimonio en bienes y no paga un peso por eso. No paga Impuesto al Patrimonio, no paga renta… si tiene un año en el que gana US$ 4:, si fuera una empresa privada debe pagar US$ 1: por Impuesto a la Renta; y como club deportivo, no paga nada. Estamos exonerados de los aportes al BPS como patrones y hasta hay exoneraciones municipales, como el 100% de la contribución inmobiliaria y de la patente de rodados de todos los padrones y vehículos afectados a la actividad deportiva. Con esos beneficios, si se administra un club con criterio empresarial y se ajustan los presupuestos a los ingresos reales, si se trabaja formando jugadores, la realidad económica de estas empresas debe ser tanto o más floreciente que la de las empresas privadas".Tampoco alza la voz. Sólo habla. Lento y en voz baja. A lo Palma. "Liverpool no tiene deudas, llevamos 4 años de balance positivo, éste lo vamos a cerrar con un superávit de cerca de US$ 2:, todos los bienes que Liverpool usufructua son propios: la sede, el estadio, Lomas de Zamora, el complejo de juveniles… transferimos jóvenes, como ahora a Rodrigo Aguirre, el año anterior a Carlos Núñez a Peñarol, aunque no fue préstamo, pero con un buen ingreso de dinero… antes facturamos muy bien con los pases de Aguiar, Fucile, Juan Manuel Díaz, y de Emiliano Alfaro al fútbol italiano… el club es autosuficiente porque vende sus jugadores a los valores que paga el mercado internacional, y eso porque no los cede tempranamente a empresarios que los mantienen en los clubes y 2 o 3 años después los venden a valores que superan 4, 5, 10 veces o más, lo que invirtieron antes. En lo que depende de nosotros (la dirigencia), nos fue muy bien: en ningún momento el pasivo estuvo por encima del activo del valor de venta de sus 3 mejores jugadores, Liverpool tiene independencia política y económica, puede abrir sus puertas a quien sea pues la contabilidad es eficiente...