El Guapo Procusto
| Autor | Matías Calero |
| Páginas | 34-51 |
EL GUAPO PROCUSTO
Contraargumento/ Año II/ N°12/ Abril 2019
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Matías Calero
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En la edición de setiembre de 2018, Ramiro Castro escribió un
interesante artículo (titulado "La Nueva Edad Media") sobre el
Proyecto de Reforma de Constitucional (de auí en más "Proyecto")
impulsado por Jorge Larrañaga. Si bien en ese momento dicha
propuesta era una simple posibilidad, hoy en día es una realidad: el
Proyecto alcanzó las irmas exigidas por la Constitución. Resulta
útil como introducción resumir el planteo ue hizo Castro en su
artículo a in de precisar ué es lo ue se uiere plebiscitar. El
Proyecto consiste en agregar ciertos contenidos a la redacción de
los artículos 11, 27 y 85 numeral 8° de la Constitución. Su parte
expositiva puede sintetizarse en los siguientes puntos: (a) los
delincuentes se aprovechan de algunas garantías constitucionales,
en particular la inviolabilidad del domicilio durante horas de la
noche, para realizar actividades ilícitas y por lo tanto es necesario
agregar un inciso a dicho artículo para permitir a las fuerzas
públicas ingresar a cualuier domicilio mediante una orden judicial
emitida por un juez competente cuando se sospeche ue se está
realizando alguna práctica delictiva; (b) es necesario asegurar el
complimiento efectivo de las penas para ciertos delitos
considerados graves (rapiña, violación, homicidios, extorsión,
secuestro, copamiento, abuso sexual, trata de personas, tráico de
estupefacientes) en el entendido de ue su reducción amplía el
fenómeno de "puera giratoria", y además se propone la creación de
la cadena perpetua únicamente revisable al cumplir el privado de
libertad treinta años de reclusión; (c) la creación de una Guardia
Nacional integrada por militares con el in de intervenir en la
seguridad interna.
La gravedad y trascendencia de los cambios constitucionales
propuestos permite suponer ue la reacción ante esta reforma es y
será contundente. Sin embargo, todo indica ue no es así. Sabemos
ue existe una contracampaña a Vivir sin miedo, cuyo slogan es "No
a la reforma, el miedo no es la forma" (1). Si bien es cierto ue el
nombre no hace a la cosa, en este caso dicho slogan dice mucho
sobre el tono de la campaña. Al igual ue lo ue pasó en 2014 con
el No a la baja, el uso de consignas supericiales y la carencia de
argumentos sistemáticos y contundentes vuelven a aparecer en
escena. Desde la articulación de esta contracampaña están
analizando distintos posibles voceros, y uno de los nombres ue se
maneja es el de Daniela Buuet, miembro del colectivo Ovejas
Negras, pero la elección de voceros tiende a ser un asunto
secundario cuando los argumentos ue los respaldan son sólidos.
El riesgo de caer en argumentos de tipo sentimentalistas y sloganes
agradables es realmente alto. Hoy, a casi un año de presentada la
campaña de Vivir sin miedo, del otro lado de la vereda no tenemos
un planteo sistemático, y ni siuiera una página web oicial a
través de la cual la ciudadanía pueda informarse sobre los defectos
y peligros de este Proyecto. Lo ue sí tenemos en una página es
Facebook donde encontramos una serie de imágenes con algunos
breves argumentos, los ue si bien van por el camino adecuado, no
pasan de ser aforismos bellamente presentados. A seis meses del
plebiscito, la necesidad de una serie de argumentos sistematizados
se hace cada vez más imperiosa. Esperemos ue más temprano ue
Contraargumento/ Año II/ N°12/ Abril 2019
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