Ajuste, consumo y fiscalización suben ingresos

El desajuste en las cuentas públicas, su impacto en la deuda y en la competitividad del país, es el centro de preocupación de la conducción económica. Así se refleja en el proyecto de Rendición de Cuentas que se está discutiendo en la Cámara Alta, que ya cuenta con media sanción en Diputados y seguramente sea aprobada en los próximos días. El objetivo que se fija este proyecto es el mismo que se estableció en el presupuesto quinquenal, alcanzar un déficit global del sector público del 2,5% del PIB en el año 2019.

Para alcanzar tal fin, se adoptaron en ejercicios pasados y se proponen a futuro, una batería de medidas que apuntan a controlar gastos y, fundamentalmente, a incrementar los ingresos. Como todo ajuste que deba soportar el sector privado, es distorsionante y repercute negativamente en la competitividad; al menos transitoriamente hasta tanto se encausen las cuentas, la economía se recupere y puedan reducirse los impuestos o sobrecostos a los que se apeló para alcanzar tal fin. Ello va de la mano de una evolución acorde del gasto. Si no se frena su ritmo de expansión será muy difícil alcanzar niveles de competitividad adecuados.

Al cabo de los siete primeros meses del presente año, los ingresos globales del sector público se incrementaron 2% en términos reales, porcentaje superior al de los egresos totales. Estos últimos los podemos descomponer en egresos primarios, que aumentaron 1,6% en términos reales (las inversiones cayeron 17,6% real) e intereses, que disminuyeron 4,7%. Como resultado de ello, en términos absolutos el déficit fiscal en el período enero-julio de 2017 es casi 10% inferior al observado en igual período de 2016.

En la evolución del gasto se observa el ajuste en marcha, que hasta el momento recayó fundamentalmente sobre las inversiones, ya que el gasto corriente creció por encima de los ingresos, lo que habla de las dificultades que enfrentará el gobierno para poder alcanzar el objetivo fiscal trazado.

Consciente de ello, las autoridades apelaron a un aumento de los ingresos, tema que analizaremos a continuación. Vistos globalmente, los ingresos aumentaron 2% reales en los siete primeros meses del año, pero resulta más relevante analizarlos desde la óptica del consolidado gobierno central-BPS (GC-BPS), ya que es el que debe lidiar con un gasto creciente.

Si bien el resultado global es uno solo, analizar a nivel del GC-BPS permite comprender mejor los impactos sobre el resto de la economía.

Visto así, los ingresos...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR