Almada se las arregló como pudo

SILVIA PÉREZRiver Plate hizo una buena pretemporada. Concentraron diez días e hicieron una gira por costa rica con varios amistosos. En todo ese tiempo el técnico Guillermo Almada trabajó con un equipo en su mente. Pero en la última semana se le desarmó."Pensábamos que estábamos muy bien para arrancar el campeonato, pero ahora no llegamos de la mejor manera. Es muy difícil trabajar así. En cada período de pases uno sabe que se le pueden ir uno o dos jugadores, pero que se te vayan siete es demasiado. Perdimos muchos integrantes muy valiosos del equipo, ahora tenemos un equipo con muchos juveniles cuyos procesos tuvimos que acelerar. Son jugadores jóvenes que están haciendo sus primeras armas y a quienes pensábamos llevar de a poco. Igual tenemos mucha confianza en poder sacar el partido frente a Nacional adelante. No vamos a cambiar nuestra propuesta", dijo Almada poniéndole el pecho a las balas.El entrenador suponía que Jonathan Ramírez, de excelente temporada anterior podía irse, pero nunca imaginó que su equipo sufriría una sangría tan grande. "Nos desacomodó porque fue en los últimos ocho días y en puestos específicos y en su mayoría titulares. Nos quedamos con muy poco tiempo para rearmarnos. Si se hubieran ido un mes antes, nos hubiéramos tomado las cosas con otra tranquilidad. El colmo fue lo de Zambrana, que en el último entrenamiento era parte del equipo y lo perdimos el viernes de noche", agregó."Ahora han llegado otros jugadores, pero nos va a llevar un tiempo ponerlos bien y adaptarlos a la idea futbolística", reconoció el DT, quien de todas formas, espera que su equipo cumpla...