El clásico en el alma de un técnico con fe

Un penal de Revetria, ynbsp; El "veintiúnico", ynbsp;gol de Badell, ynbsp; El "Tano" y Pablo, ynbsp;El galón de whisky del 96, ynbsp;Las charlas. El técnico de Peñarol habló de todo con Ovación antes del Clásico1) Como jugador, no recuerdo cuál fue. Lo jugué en el 70 y poquito, pasa que yo empecé a jugar-jugar del segundo semestre del 76 en adelante, pero entré a alguno antes. No tengo un registro, pues yo nunca vi al fútbol como algo personal, por eso no me acuerdo mucho de mi propia historia. Como entrenador, fue el del Apertura del 96.2) No recuerdo el año, pero hubo un clásico que fue importante. Hubo un penal que no sé si lo atajo o Revetria lo erra y pega en el palo… y como entrenador, el empate en las finales del 96 que nos dio el Uruguayo, porque en el anterior, en la primera final, habíamos ganado 1 a 0, pero en realidad no ganamos nada. Además, cómo fue: habíamos quedado los dos con 9, porque echan a Ostolaza, y el "Vasco", inteligente, busca a quién llevarse con él, y se llevó al "Vasco" nuestro (Aguirregaray), y a Martín Rodríguez. Si mal no recuerdo, en esa misma jugada nos empatan. Hice entrar al "Tano" Gutiérrez y tuve que dejar solo a Pablo (Bengoechea) adelante. No tenía otra alternativa y así lo llevamos hasta el final. Era el clásico que nos daba el cuarto campeonato, era una responsabilidad muy grande…3) Me acuerdo de un clásico del 78 que nos empataron en la hora. No sé si fue Calcaterra… yo trato de salir jugando, porque en esa época se podía pasársela al zaguero en un saque de arco, para que te la devolviera y vos la agarrabas y la sacabas con la mano; y… bueno, se la doy a un compañero, demora en devolvérmela, yo voy atrás a pedírsela, "¡te llevan, te llevan!", le gritaba, y cuando quise acordar se la llevaron y nos clavaron en la hora. Yo me quería morir. Como técnico, esa vez en el Clausura del 96, que íbamos ganando 1 a 0, bien, Abeijón nos hace un gol de corner, y nos dan vuelta el resultado, porque nos remata el flaco Badell desde afuera del área, con el "veintiúnico" gol que hizo en su vida el "Flaco"; por lo menos así, le pegó bien de arriba, pasó entre 400 piernas y se metió en el arco. La desazón fue muy grande, porque en ese clásico empezamos 4 puntos abajo, promediando el segundo tiempo íbamos 1 a 0 y estábamos a uno, y al final quedamos a siete. Ahí largué la toalla del Clausura y empecé a preparar el equipo para las finales del Uruguayo.4) No, no suelo hacer eso porque creo que, sin proponérselo, uno ya está diferente...