Dieron una clase de cómo hay que jugar

La última fecha fue una final. Sudáfrica recibía a Nueva Zelanda en el cierre del Rugby Championship 2013 y los dos tenían chances de quedarse con el título de campeón, algo que quedó en manos de los All Blacks, que demostraron porqué son los mejores del mundo en esta disciplina.Los neozelandeses ganaron un partidazo por 38 a 27 y se quedaron por segunda vez consecutiva con el Cuatro Naciones en un partido épico.Los sudafricanos necesitaban ganar con puntos bonus para quedarse con el título, pero al término de la primera mitad eso no sucedía en el Ellis Park de Johanesburgo, porque la visita se fue al descanso 21-15 arriba.Pero en el complemento, llegó lo mejor. Pese a las amarillas a Liam Messam a los 46` y Ben Francks a los 63`, los All Blacks pudieron dar vuelta una historia que los tenía abajo en el marcador.Es que los Springboks llegaron a dar vuelta el partido en cifras de 27 a 24 a los 58`, pero después no pudieron marcar la diferencia a pesar de que ahí ya habían conseguido el cuarto try para superar a Nueva Zelanda en la tabla de posiciones y consagrarse como campeones.Pero cuando más presionados estaban los All Blacks, sacaron lo mejor de sí mismos, ayudados también por los errores locales, primero con un despeje afuera del fullback Zane Kirchner y después con un ataque neozelandés, en el que los sudafricanos fallaron en tres...