Dejó dos puntos más ¿y el liderazgo?

En menos de una semana Peñarol perdió cuatro puntos, porque ante Sud América repitió el empate del sábado pasado ante Defensor Sporting, que en el caso de anoche hasta pudo haber sido una derrota, porque en los descuentos el travesaño evitó la segunda caída del arco de Migliore, con lo que no sólo se esfumó la eficacia sino también el espejismo que muchos vieron en el equipo aurinegro durante las tres primeras fechas del Torneo Apertura. Para empezar, al no poder jugar Jonathan Rodríguez entró Carlos Núñez, que por pasajes impuso su potencia difícil de sobrellevar para los defensas "buzones", pero esa misma pujanza tan arrolladora como desordenada lo llevó, primero a malograr alguna situación propicia y luego -ya con "el balde puesto"- a protagonizar dos incidencias (protesta y simulación de penal) por las que vio una amarilla y, de no mediar un grueso error de Cunha, debió recibir la roja, con lo que quedó probado -al igual que cuando Olivera lo suplantó para el complemento- que no es igual tener un plantel con variantes reales que uno simplemente numeroso. Con problemas de contención e incluso de armado por la imprecisión de Píriz en el mediocampo, porque el "Japo" fue sacudido varias veces y no lo dejaron gravitar ofensivamente como en otras ocasiones, Peñarol quedó expuesto en la faz atacante a lo que generara Diogo Silvestre con sus idas hacia arriba y lo que Zalayeta pudiera pasar en limpio ante centros y segundas pelotas que, desde los minutos iniciales, fueron de difícil solución para la retaguardia de los "buzones". Para el complemento, entró Olivera por Núñez y, sin el empuje de éste, con Pacheco, Zalayeta y Olivera juntos, Peñarol bajó las revoluciones, no llegó ni bien ni mal y, en una jugada que le suele doler a los equipos que defienden con...