5 estrenos para la historia

El 11 de julio de 1966, la reina Isabel saludó a los jugadores de Inglaterra y Uruguay, formados ya sobre el césped de Wembley a la espera de dar el puntapié inicial del Mundial. Cerca ladraba "Pickles", el perro que encontró el trofeo Jules Rimet robado en una de las tantas historias que tiene la Copa del Mundo. Ese fue el primer partido inaugural como tal, como los que ahora estamos acostumbrados a ver cada cuatro años; por más que en 1950 Brasil hizo algo similar, abriendo la Copa con goleada ante un debilitado -anémico, y no en sentido figurado- equipo de México.Hasta ese momento era normal que se jugaran, en el día de apertura de cada Mundial, dos, cuatro o hasta ocho partidos. Es sabido, por ejemplo, que en 1930 quedó marcado el Francia-México en cancha de los Pocitos por el gol de Laurent; mientras a la misma vez estaban jugando Estados Unidos y Bélgica en el Parque Central.Muchos de los partidos inaugurales han pasado con más pena que gloria por la historia de los Mundiales. Otros están ahí, siempre dispuestos a hacerse un lugar en la memoria de los futboleros por algún motivo en particular.Por estos lados, por ejemplo, seguramente poco se recuerde de Alemania 4-Costa Rica 2 que abrió el Mundial de 2006. Pero sí sigue presente en varias retinas el triunfo de Camerún ante la Argentina defensora del título en Italia 1990.Los 1-0 de Alemania ante Chile en el `74 y Bolivia en el `94, seguramente quedaron marcados en esos países sudamericanos y ningún lado más. Mientras que el empate de Alemania y Polonia en el 78 sigue siendo considerado uno de los partidos más tediosos en la historia de los Mundiales: sin goles en una fría y gris tarde bonaerense. Tampoco pasó a la historia el 1-1 de Italia y Bulgaria en México `86.La ausencia de Mandela por duelo es lo más recordado del último partido inaugural, en Sudáfrica. Hoy Brasil y Croacia toman la posta, con un lugar en la historia esperándolos.Milán, 1990Uno de los partidos inaugurales más...