Lo que falta y lo que sobra entre las candidaturas al Oscar 2010

Alguien ha dicho ya que no hay nada más opinable que lo opinable, y si existiera un procedimiento científico e infalible para determinar las calidades artísticas los críticos no serían necesarios, lo cual probablemente constituiría una ventaja.Aclarado el punto, siguen en pie, sin embargo, algunas interrogantes. Aunque el juicio estético sea inevitablemente aproximativo y falible, y comporte una ineludible dosis de subjetividad, existen por lo menos algunos criterios "aceptados", mezcla de sentido común de aficionado y entrenamiento de espectador especializado, que merecen un poco más de respeto que las meras opiniones "legas". Todo canon (oh, sombra de Harold Bloom) existe para ser violado, pero ello implica que los cánones existen, al menos en un contexto, al menos en una cultura. Y cuando uno advierte que en una determinada lista sobra algo o falta algo que según el sentido común, cierto consenso o algunas opiniones expertas debería no estar o estar, empiezan las preguntas. La nómina de candidaturas al Oscar de este año ha generado algunas de ellas.Un par de datos previos que pueden servir para ubicar el problema. Desde el año pasado, el número de candidaturas en el rubro mejor film ha sido aumentado de cinco a diez, de manera que hay más lugares disponibles, la posibilidad de llamar la atención sobre más películas, y (calculadamente) el deseo de interesar a más público en la emisión por televisión de la ceremonia de entrega de las estatuillas. Hay que olvidarse de aquello de que las películas candidatas son necesariamente las más populares. Los procedimientos de exhibición han cambiado (los multiplex han jugado en ello un papel fundamental), y de ahí que más gente de la Academia tienda a ver películas que no necesariamente llegan a públicos masivos. Ello explica, por ejemplo, que Vivir al límite de Kathryn Bigelow pudiera ganarle el año pasado a Avatar de Cameron, pese a lo que dijera la taquilla. Una película "chica", con buena crítica, mejor "boca a boca", y más tiempo en cartelera aunque en menos salas, tiene más chance que antes. Entre los candidatos de este año hay por lo menos un ejemplo: Lazos de sangre de Debra Granik, un film de bajo presupuesto y un duro retrato del "patio trasero" de la sociedad norteamericana que nunca va a recaudar cientos de millones pero que ha logrado candidaturas en el rubro mejor película, actriz, actor y actriz secundarios y libreto, con reales posibilidades de llevarse algo (actriz secundaria para Melissa Leo, por...