Las finanzas en los partidos

Varias son las interpretaciones sobre lo que se entiende por democracia. Muchos la asimilan a un proceso legitimado por la celebración de elecciones y al funcionamiento de instituciones democráticas.

Otros la definen a partir de la "substancia", relacionada esta, más a su contenido concreto que a las formas que la regulan y otros solo por la forma: si hay elección, hay democracia. De ahí surge la curiosa definición de las democracias no liberales que practican ritos formales pero ejercen el poder mutilando cuerpos y almas, suprimiendo las libertades políticas y económicas.

Por eso es bueno volver a los griegos. Este pueblo, más allá de sus ideas originarias, incorporó como concepto central la "isonomía", es decir, el principio de igualdad ante la ley de todas las personas. Esto se traduce en el derecho de cada uno de elegir sus gobernantes en un marco pluralista que contempla las diferentes visiones en cuanto a la orientación de los gobiernos.

Es por eso que para nosotros el pluralismo y la pureza del sufragio son las columnas de una verdadera democracia; de tal modo, que todo lo que impida o limite estos derechos desvirtúa el sistema y compromete el ejercicio de la libertad.

Por eso la Constitución y las leyes son liberadoras, en la medida que ponen en un plano de igualdad a todas las personas, relegando lo político a lo jurídico como forma de comprometerse con la Institucionalidad. No hay democracia sin instituciones fuertes. Estas hacen a la fortaleza del sistema republicano basado en la división de poderes, y en especial, en la independencia del Poder Judicial.

Pero estos aspectos institucionales no alcanzan. La democracia liberal descansa en la existencia de partidos políticos que con sus autoridades y programas de gobierno dan sentido a la convivencia pacífica entre mayorías y minorías.

Sin embargo, en la mayoría de los países de América Latina los partidos políticos se vienen debilitando peligrosamente. Coaliciones circunstanciales, el surgimiento de movimientos cuyo único objetivo es evitar que otro candidato o candidata sea electo y los respaldos accidentales restan importancia a las propuestas de gobierno sobre las que decide el ciudadano a través del ejercicio del voto universal y secreto.

En estos días, la campaña electoral peruana quedó reducida a insultos y graves acusaciones entre los candidatos. No existieron debates sobre el contenido de propuestas de fondo. Pero los problemas no quedan solo es eso, ya que, lo más...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR