Mejor no hablar de ciertas cosas

De un tiempo a esta parte -en especial tras el éxito de El secreto de sus ojos- cristalizó en el cine argentino cierta tendencia imperante hacia los policiales.Tesis sobre un homicidio (2012), ¡Atraco! (2012), Todos tenemos un plan (2012) y Séptimo (2013) comparten (además de a Ricardo Darín y Daniel Fanego, presentes en más de una, y la misma productora, Haddock Films, que está detrás de varios de los films citados) apuestas de producción de alto calibre y guiones que se juegan en el policial o bien en los límites de éste. Betibú, dirigida por Miguel Cohan (Sin retorno) sobre una novela de Claudia Piñeiro (de quien también se adaptó Las viudas de los jueves), continúa con esta línea de prolijidad más bien desabrida.Un hombre aparece degollado en la planta alta de su casa ubicada en un country bonaerense. No es cualquier víctima: se trata de un empresario que tiempo atrás fue sospechoso de la muerte de su propia esposa. Del caso se harán cargo un periodista experimentado (Daniel Fanego, en un rol secundario que se roba el protagonismo), un editor joven y entusiasta (Alberto Ammann) y una novelista de mucho reconocimiento (Mercedes Morán) que redactará columnas sobre el asunto.> Si no puede ver el video haga click aquíEn sus primeras tres cuartas partes, Betibú se arma prolijamente como un policial del montón que recrea bien la dinámica de un diario y su inmersión en un asesinato. El problema viene con la necesidad de...