Una moción que importa

Un moción, que Uruguay votó y promovió, sostuvo que no fueron ni "libres, ni justas, ni trasparentes" y fue aprobada por 25 países. Siete optaron por abstenerse y solo, uno (Nicaragua, el afectado) votó en contra.Canadá, Antigua y Barbuda, Chile, Costa Rica, Ecuador, Estados Unidos, República Dominicana y por supuesto Uruguay promovieron esta moción ampliamente apoyada. Mientras tanto Honduras, México, San Vicente y las Granadinas, Santa Lucía, Belice, Bolivia y Dominica se abstuvieron. Argentina, que hasta ahora había evitado condenar al régimen de Ortega, se plegó inesperadamente a la posición mayoritaria.> > Fue un mensaje claro y necesario en un momento en que mucha gente parece confundida respecto a que es una democracia. Para América Latina, que ha tenido una histórica relación conflictiva con esta forma de gobierno, fue una clara señal de cuales rumbos no debería tomar el continente.> > El canciller uruguayo, Francisco Bustillo dijo que era inaceptable celebrar elecciones estando encarcelada la mayor parte de los candidatos de la oposición. Daniel Ortega despejó su camino para seguir en el poder, metiendo presos a siete candidatos, entre ellos a Cristiana Chamorro que emergía como una seria amenaza para él.> > El régimen que impera en Nicaragua viola derechos humanos, cercena la libertad de prensa, reprime a sus ciudadanos con violencia, pasa por alto las instituciones y concentra todo el poder en manos de Ortega y su esposa, que no han tenido escrúpulos para ejercerlo con férrea prepotencia. ¿Puede haber duda que un régimen es dictatorial cuando en forma sistemática encarcela uno por uno a sus principales adversarios? Sin embargo, hay quienes insisten en llamar democrático lo que no lo es.> > Uruguay asumió una correcta línea de trabajo en política exterior. Es bueno que desde los foros regionales se defiendan y hagan prevalecer los valores democráticos y se condenen elecciones amañadas, restricciones a las libertades ciudadanas y violaciones a los derechos humanos.> > Esto no implica cortar relaciones diplomáticas, ni llamar al embajador de regreso ni incluso, en caso de haberlos, frenar intercambios comerciales. Pero sí importa dejar claro que allí no hay una democracia y que no puede aceptarse que un miembro de un organismo integrado por la...

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