Händel convertido en danza

Esta noche es el estreno de "El Mesías", espectáculo que causa gran expectativa, dado que reúne al Ballet Nacional Sodre (BNS) y al notable coreógrafo argentino Mauricio Wainrot. Irá desde hoy hasta el jueves 26. Además, el BNS dio a conocer un par de novedades.Según adelantó el director artístico del BNS Julio Bocca, este espectáculo no cuenta con los grandes decorados a los que la compañía oficial tiene acostumbrado a su público. El montaje apostará a una producción de menos elementos, aunque la expectativa está puesta en las coreografías, ya que puesto que Wainrot es un artista inquieto, de larga trayectoria, que ha sorprendido por su original trabajo con los bailarines. Prueba de ello fue Un tranvía llamado Deseo, que sobre el clásico de Teneessee Williams hizo con el BNS en 2011, sorprendiendo gratamente."Yo tengo un vínculo con Uruguay desde toda la vida, porque tengo parientes uruguayos. La primera vez que vine a este país yo tenía 12 años, y después que se acabó el peronismo pude volver a tener una relación: entonces mi papá lo primero que hizo fue venir a ver a los parientes, porque mis viejos son inmigrantes polacos, y conocí acá a mis primos lejanos. Desde entonces fue muy continua la ida y venida. ¿Quién no quiere a Uruguay?", comentó a El País Wainrot, quien recuerda que la primera vez que vino a trabajar a Uruguay todavía no estaba el Auditorio Nacional Adela Reta. "Vine a hacer Consagración de la primavera. Era otro elenco, como otra compañía, otro mundo. Se trabajaba en condiciones que no eran muy buenas. Nada que ver con lo que es la compañía actualmente. Esta es la tercera vez que vengo a trabajar", asegura.Pasando a El Mesías, el coreógrafo puntualizó que la obra es "muy exigente con los bailarines, porque técnicamente es muy difícil, pero también es muy gratificante para ellos bailar esta obra, porque tiene una música maravillosa, y también la gratificación de estar en escena todos juntos todo el tiempo. A los bailarines les encanta. En cada compañía que la monto, los bailarines se enamoran del proyecto"."La versión que vamos a estrenar acá en Montevideo va a tener 30 bailarines: originalmente la obra la hice para 24, pero luego agregué más bailarines, para que más gente baile. Y en cuanto a la escenificación, es conceptual, es despojada, y es muy limpia, se ve muy claramente la obra. Es todo muy abierto. No tiene nada que ver con el barroquismo de otras producciones mías, y también es lo opuesto a Un tranvía llamado Deseo", asegura el...