Está ok: no se baja del Mundial de Brasil

Tras el derrumbe que terminó con la vida de dos obreros cuando se colocaba una de las partes del techo del Estadio Itaquerão, la ciudad de San Pablo vive en un profundo dolor.Por estas horas, el futuro estadio del Corinthians está rodeado por aflicción y angustia.Varios hinchas, y no solo del Timão, se arrimaron al predio del escenario a dejar carteles con rezos, estampitas y mensajes para los fallecidos. Por este motivo, el gobierno decretó tres días de duelo.Tras la catástrofe, hubo varias zonas que fueron bloqueadas para prevenir la seguridad de las personas.Además, se comenzó a realizar el peritaje correspondiente con el fin de conocer exactamente cuáles fueron las causas del accidente.La parte afectada del predio quedó momentáneamente inutilizada hasta que se completen todos los estudios. De esta manera, la construcción continuará en el resto del estadio. Por eso mismo, la empresa brasileña Odebrecht, responsable de la construcción del Itaquerão, afirmó que su presencia en el Mundial de Brasil no corre ningún riesgo.En conferencia de prensa, Frederico Barbosa (ingeniero y director operacional de Odebrecht), sostuvo que pese al accidente, la estructura del escenario deportivo "no está comprometida".Barbosa recalcó que se había realizado ese mismo procedimiento otras 37 veces en la construcción del estadio.Por otra parte, también explicó que el siniestro se dio en la hora del almuerzo y la mayoría de los obreros estaban en la cantina, por lo que la tragedia podría haber sido mucho peor.Mientras tanto, y pese a las garantías que asegura la constructora, el Ministerio Público de San Pablo comunicó que "solamente si los elementos técnicos indican necesidad de...