No importó quién juega

La de ayer no fue una práctica más para el plantel de Peñarol. El entrenamiento, que se llevó a cabo en el Campeón del Siglo, comenzó con todos los futbolistas mirando al piso en una ronda en la mitad de la cancha. Era el minuto de silencio que hicieron por Hernán Fioritto, el hincha y socio del club que fue baleado en Santa Lucía y que falleció el viernes.

Durante todo este tiempo los futbolistas del primer equipo carbonero habían estado pendientes de la salud de Hernán, así como de los otros dos hinchas agredidos. Es más, varios de los futbolistas habían ido a verlo al sanatorio.

No fueron pocos los que expresaron sus sentimientos en sus respectivas cuentas de twitter. "Dolor. Mucho dolor", escribió Nicolás Dibble.

Por eso, y como es lógico, el estado anímico del plantel no era el mejor, aunque igual se cumplió con el movimiento que estaba previsto por el entrenador Fernando Curutchet. Se llevó a cabo un fútbol interno, pero esta vez poco importó quiénes eran los titulares y quiénes los suplentes.

Cabe recordar que de cara al partido frente a Racing, y ante la lesión de Nicolás Freitas que iba a volver a...

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