Una pequeña corrección al maestro

Tabárez volvió a repetir -porque se lo preguntan y lo ha expresado en muchas oportunidades- que el mundo actual es "muy diferente" al de la época del "Maracanazo".No es nuevo tampoco que el técnico se muestre cauto; pero es bueno como señal hacia afuera, porque para la creencia popular que el Mundial 2014 se juegue en Brasil, para Uruguay -por lo que pasó en el 50- es como si a Popeye le dieran espinaca.En lo que se quedó corto Tabárez es en que "no hay nada que pueda hacer Brasil para bajar la dimensión de lo que fue Maracaná para los uruguayos"."La plata del fútbol que se va, no se recupera más", suelen decir los protagonistas de ese ámbito...