Con su propia identidad

DURAZNO | VÍCTOR D. RODRÍGUEZAún resuena en las calles duraznenses el grito de "dale campeón", el entusiasmo y los bocinazos de la interminable caravana que el domingo (un día después de la consagración en Salto) recorrió los barrios y cada rincón de la ciudad duraznense.Permanece a cada paso y a cada instante, el eterno "gracias" de la gente hacia los jugadores, cuerpo técnico y dirigentes. Durazno ganó la 8va. Copa Nacional de Selecciones de Ofi, lo hizo por primera vez en el actual formato, pero volvió a subirse al podio del fútbol del interior a lo grande, invicto y por décima vez en su historial. Además, sumando las 17 consagraciones en la Confederación del Sur, es sin duda alguna, la selección más laureada del interior del país.ESTIRPE. La casaca "color pitanga" tuvo esta vez un equipo fortalecido en todas sus líneas, con seis o siete jugadores que vienen integrando un proceso de cinco años. Primero dirigido por José "Pepe" Urruzmendi, que dejó el equipo en octavos de final para irse al exterior. El profesor Claudio Grasiuso fue elegido por la Liga de Fútbol presidida por el doctor Juan Fernando Delgado, para sustituirlo. Y allí empezó todo. Más allá de la disposición táctica empleada o de los resultados obtenidos, el equipo mantuvo intacta la estirpe del fútbol duraznense, con una excelente preparación física, defensas aplicadas a la marca y con afán ofensivo, mediocampos batalladores y punteros abiertos contra la línea, descargando para la aparición del número nueve o los volantes ofensivos. Matías González, el golero, resultó impenetrable (solo le convirtieron 7 goles), una defensa con metros de altitud, experiente y expeditiva conformada por Raúl Echandía, Fernando Casanova, Gerardo González y Giovanni Rodríguez. En mitad de cancha la precisión de Diego Paolo Tierno por derecha y el capitán Jorge Reyna como clásico número cinco (ambos, junto al ariete Andrés Rivas, tricampeones del Interior), Walter Olivera, de ida y vuelta permanente, al lado de Wilmar "Monito" González, volante ofensivo de cabeza levantada y con pases milimétricos. En ofensiva, quizás lo...

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