Los riesgos del 2011 hacen ver la coyuntura económica con cautela

La economía pasará nuevamente en el 2011 por un muy buen momento, con un incremento en el nivel de actividad superior a lo que es la tendencia histórica, ingresos de los hogares más altos, buenas condiciones financieras que elevarán la disponibilidad de crédito y con ello mayores posibilidades de consumo e inversión. El principal problema para el gobierno, las empresas y las familias es disfrutar el momento sabiendo que la trayectoria hacia un mayor desarrollo económico y bienestar social no está asegurada. Se puede hacer un paralelismo con el deporte: somos los cuartos del mundo en 2010 y hay que disfrutarlo, pero ello no quiere decir nada para la próxima Copa América y mucho menos para la clasificación al próximo Mundial. El riesgo más grande que se corre cuando una situación extraordinaria se sostiene por un tiempo es pensar que es para siempre y dejar de mejorar.En este contexto es inevitable entonces comenzar a preocuparse por los cuellos de botella que hay que superar para que la oferta pueda sostener el ritmo de crecimiento que impone la demanda. También es de justicia señalar que hay desequilibrios que no se observan en los datos del 2010 pero ya se empezaron a generar debido a las políticas fiscal y monetaria expansivas, el crecimiento del crédito, las bajas tasas de interés, la apreciación de la moneda y el aumento del precio de los bienes y servicios no transables en comparación con los transables.El repaso de la coyuntura económica actual y las perspectivas para el 2011 permite visualizar cómo lentamente la economía uruguaya, en la medida que disfruta el buen momento, se hace cada vez más dependiente de que no se reviertan las condiciones externas favorables. Esto no sería un problema si no fuera porque la continuidad en el 2011 de un escenario externo benévolo enfrenta tres riesgos: 1) el riesgo de la inestabilidad del sistema financiero internacional, 2) el riesgo que la guerra de divisas se profundice y se traslade a la guerra comercial y 3) el riesgo que Brasil se vea obligado a modificar sus políticas en forma repentina. Son tres riesgos que se potencian entre sí, por lo que alcanza con un disparador fuerte en sólo uno de ellos para que se genere una reacción en cadena y ocurran los tres simultáneamente.ACTIVIDAD ECONÓMICA. Tras la marcada desaceleración que sufrió el nivel de actividad en el año 2009 debido a la crisis financiera internacional, la economía recobró sus bríos en el presente año. Impulsada por un contexto internacional que rápidamente se volvió favorable, y apuntalada por políticas macroeconómicas internas expansivas, crecerá este año por encima de su tendencia de largo plazo.En los tres primeros trimestres del año el PIB se incrementó un 8,8% en relación a igual período de 2009. Tal crecimiento presentó algunas características particulares que determinan que difícilmente pueda ser sostenido en el mediano plazo, dada la capacidad productiva actual de la economía.Si se analiza el comportamiento del PIB por ramas de actividad, se constata que fueron tres los sectores que explican la expansión: Comercio, restaurantes y hoteles; Transporte, almacenamiento y comunicaciones; y Suministro de electricidad, gas y agua. La producción de bienes primarios e industrializados registra tasas mucho más moderadas y no son pocos los casos donde se señalan dificultades para...