Slash demostró el motivo de su vigencia y dio clase

Slash ofreció un espectáculo enérgico basado en canciones de Guns `N Roses, Velvet Revólver y sus dos discos solistas, prescindiendo de artilugios pirotécnicos y pantallas de led. Fue suficiente con la música y su maestría en la guitarra.Aunque el concierto fue pensado originalmente para el Velódromo Municipal, el cambio de escenario no le resta mérito al exguitarrista de Guns `N Roses que terminó agotando las entradas en el Teatro de Verano. En todo caso, el que falla a veces es el público, frente a visitas de esta importancia, que pueden resultar únicas para Montevideo.A Slash le bastó con las cinco mil personas que celebraron su vigencia y su capacidad de adaptación, puesto que el show atravesó de forma avasallante y con excelente calidad de sonido, distintas épocas de su carrera. El grueso del repertorio estuvo basado en los discos que publicó como solista, pero los asistentes obtuvieron mucho más de lo que fueron a escuchar.Slash apareció en escena después de una larga previa a cargo de Subte de Uruguay y Coverheads de Argentina, interpretando Halo de Apocalyptic Love desde su endemoniado encordado, con Myles Kennedy en la voz. Un vocalista que, por momentos, recuerda al Axl Rose de la primera época de Guns `N Roses. El músico tocó casi dos horas con la atención puesta solamente en su instrumento, usando gafas oscuras, el pelo hacia adelante y la galera inamovible.Su trayecto por el palco estuvo sujeto a sus ganas y a las necesidades de una propuesta de rock de estas características, pero Slash no necesita más que hacer un solo de guitarra para arrancar ovaciones enardecidas. Sólo tomó el micrófono en dos oportunidades para saludar y agradecer a Montevideo, una de ellas fue al final del segundo bis, cuando ya lucía una musculosa con la bandera de Uruguay...