Un trabajo histórico colectivo de gran aliento

Es todo un acontecimiento. El próximo miércoles a las 19 horas en el Salón Azul será lanzado el libro "Las instrucciones del año XIII - 200 años después", un trabajo colectivo de largo aliento coordinado por Gerardo Caetano y Ana Ribeiro.El acto contará con la participación del presidente de la República José Mujica, el presidente de la Cámara de Representantes Dr. Germán Cardoso, el presidente de la Comisión Montevideo Capital Iberoamericana de la Cultura Dr. Héctor Lescano, y naturalmente los coordinadores del libro, doctores Caetano y Ribeiro. La ceremonia incluirá la representación de un fragmento de la obra Instrucciones para un pueblo libre de Carolina Cerruti y Ana Rico.Hay una obvia razón de fechas para que un libro de estas características salga a luz (las célebres Instrucciones artiguistas, como lo recuerda el subtítulo, cumplieron este año dos siglos), con el añadido de que debe tratarse del bicentenario menos insensato que haya podido celebrarse últimamente acerca de los procesos independentistas. Conmemorar las Instrucciones es algo concreto y sustancial: un documento de particular peso en el proceso político de la época, y una oportunidad para reflexionar acerca de quiénes quisimos ser hace doscientos años y acaso quiénes somos hoy (algo, por cierto, bastante diferente).Es casi seguro que los responsables del libro recordaron que con él estaban celebrando otro número redondo: el centenario del clásico Las instrucciones del año XIII de Héctor Miranda, que sigue siendo un texto esencial a la hora de analizar el programa artiguista pero que es también un libro de abogado instalado en el universo del Deber Ser, un análisis jurídico que prescinde en buena medida del examen del entorno real que nutrió el proyecto artiguista. Hace cien años, Miranda cumplió un papel esencial en el reforzamiento del imaginario liberal del primer batllismo, del mismo modo que algunas décadas más tarde el Reglamento Provisorio de 1815 serviría para inventar un Artigas repartidor de tierras y (si uno se descuida) casi socialista.Cien años más tarde, ese enfoque merecía rectificaciones...