Vecinos piden por la Guardia Republicana

Pasaron dos años del primer megaoperativo y la Policía volvió el viernes a Chacarita de los Padres. Los vecinos, cansados de vivir en zona roja, dicen que solo sirve la presencia constante de efectivos y esperan el patrullaje de la Republicana.El 7 de abril de 2011, hace ya dos años, 70 efectivos de distintas reparticiones de la Policía y un helicóptero ingresaron sorpresivamente en Chacarita de los Padres, una de las "zonas rojas" de Montevideo, ubicada a la altura del kilómetro 12,500 de Camino Maldonado.Buscaban autos robados y bocas de drogas. Fue el primero de una serie de megaoperativos realizados en las zonas más peligrosas de Montevideo y de Canelones. Se quiso dar una señal bien concreta: la Policía puede ingresar en todos los barrios.En los últimos días, el Ministerio del Interior decidió lanzar una nueva ofensiva y envió a la Guardia Republicana (la principal fuerza de choque de la cartera) a las zonas rojas: Marconi, Borro, Cerro y Chacarita de los Padres. Las primeras cifras hablan de 17 personas detenidas, 41 motos requisadas y más de 270 autos inspeccionados en los distintos operativos.Sin embargo, en todo este tiempo que pasó desde aquel primer megaoperativo hasta el despliegue del viernes, poco cambió para los vecinos de Chacarita de los Padres. Los robos y la violencia siguieron siendo moneda corriente.De aquel gran despliegue solo quedó la Comisaría móvil número 3 sobre Camino Maldonado que, en la práctica, está muy lejos de los núcleos más peligrosos del lugar. Según cuentan los vecinos, lo único que ha repercutido en "algo más de seguridad" ha sido la apertura de la Seccional 25°, en Camino Maldonado y Susana Pintos, a pocas cuadras de Chacarita de los Padres.La sede policial, inaugurada a mitad de diciembre de 2012, hizo que los patrullajes y los controles en la zona sean más frecuentes, lo que los vecinos entienden que es la explicación para que "la cosa esté un poco más tranquila" y los robos parezcan haber bajado durante los últimos dos meses.MANO DURA. De todos modos, la idea que predomina entre los vecinos y comerciantes de la zona, donde también se mezclan los barrios Bella Italia y Santa Teresa, es que cuanto "más dura" sea la presencia policial, menor será la inseguridad, según expresaron a El País en una recorrida por el lugar.Libertad, una mujer que vive próximo a Camino Maldonado, señaló: "Cuanto más efectivos haya en la calle mejor, porque esto se les fue de las manos. Cuanto más pesados sean, mejor va a ser". Luego...