La veda alcohólica

La polémica absurda en torno a esta ley, votada a las apuradas, para que los turistas que vienen a un partido puedan tomar alcohol, deja en evidencia un defecto congénito de nuestro Estado. Y de nuestros políticos. Es esa mirada paternalista, en la que un burócrata, a sueldo del contribuyente, le dice al ciudadano mayor de edad, lo que puede hacer o no en...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR