Vitor Ramil edita disco doble con libro

Vitor Ramil no puede ser acusado de seguir caminos obvios, ni en sus canciones, ni en su carrera. La elección de vivir en Pelotas, de aproximarse a la tradición de la milonga (desconocida por aquí)...Y, ahora, edita un "songbook", iniciativa rara para un compositor como él, más respetado que popular. Más que eso, un CD doble, Foi no ms que vem, con 32 composiciones, y con 17 participaciones especiales, entre ellas Jorge Drexler, Milton Nascimento, Fito Páez, Ney Matogrosso, sus hermanos Kleiton y Kleidir, Marcos Suzano, y Carlos Moscardini, que complementa el libro, trazando un panel de su obra y ayudando a entender su especificidad."Mis canciones no son herméticas. Tom Jobim es mucho más complicado", dice Ramil. "Pero mis armonías tienen particularidades que pueden dificultar de verdad a un buen guitarrista. Uso muchas cuerdas sueltas, afinaciones propias. Desarrollé una manera muy propia de tocar mis canciones, porque muchos hablan conmigo de esa dificultad de sacarlas. Como no soy un autor célebre, un compositor que supuestamente merecería un `songbook`, eso abre un frente nuevo para otros. Porque ese tipo de registro no es positivo sólo para los grandes figurones. Es importante que tengamos eso de los artistas que están produciendo en la actualidad".El primer CD abre con Foi no ms que vem, canción de amor dedicada a Ana Ruth, esposa de Vitor. Satolep (forma como el compositor llama a su Pelotas) es el último tema del segundo disco. Entre la mujer y la ciudad, varias referencias a la poética particular que creó a lo largo de los años, temas e imágenes recurrentes.La decepción por no lograr tocar las canciones que le gustaban cuando comenzó a aprender el instrumento ("Oía una canción y cuando iba a mirar una revistita de cifras generalmente era tosco") parece haber motivado la producción del "songbook". El registro en el libro es cuidadoso, con armonías, partituras, afinaciones, diagramas y letras, además de una biografía del compositor, análisis técnicos y críticas, fotos, manuscritos y discografía. El trabajo fue hecho sin apuro. La sugestión de Vagner Cunha (responsable por las partituras al lado de Fabricio Gambogi) de organizar el "songbook" viene de fines de los años 90, cuando el trabajo comenzó. La editora que publicaría el libro cerró y el proyecto paró."Para el `songbook` fue bueno, porque en los años 2000 mis cosas más consistentes", dice refiriéndose a los discos Tambong, Longes, Satolep sambatown y Délibáb. "Pero recientemente la editorial...